Joven tucumano prendió fuego a su madre y luego se ahorcó

La capital de Tucumán se vio consternada por un parricidio (cuando un hijo asesina a su padre o madre) seguido de suicidio. Debido a que no se halló signos de la participación de una tercera persona, los investigadores del caso consideran que un joven prendió fuego a su madre y luego se ahorcó.

El hecho tuvo lugar este lunes en una vivienda ubicada a 103 kilómetros de la capital tucumana, a metros de la entrada del pueblo Alpachiri, sobre la Ruta Nacional 65. Allí, Ceferina Francisca Ortíz (48) fue encontrada sin vida. Su cuerpo presentaba graves quemaduras, las cuales le causaron la muerte, de acuerdo con el informe forense.

Su hijo, Ismael benjamín Pereyra, de 23 años, fue encontrado ahorcado en el terreno baldío contiguo a la vivienda, lo cual llevó a las autoridades del caso a concluir que se trató de un parricidio seguido de suicidio.

En la autopsia preliminar que los peritos forenses realizaron sobre ambos cuerpos reveló que no se encontraron signos ni evidencias de la participación de un tercero. No obstante, se realizarán pruebas más exhaustivas en los próximas días.

En el caso interviene el Ministerio Público Fiscal, mediante la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Física, al mando del fiscal Miguel Varela, quien ordenó una inspección ocular en el lugar a cargo de los profesionales correspondientes. También se ordenó la toma de muestras para su posterior análisis.

Este no es el primer parricidio que sucede en la provincia de Tucumán en agosto, ya que el 5 del pasado mes una adolescente asesinó a su padre con el filo de una botella de vidrio para defender a sus hermanos. Según se pudo determinar, el hombre, un vendedor ambulante, perseguía a uno de sus hijos y lo amenazaba con golpearlo con una piedra yansada de las constantes agresiones hacia ella y sus hermanos, la joven menor de edad atacó a su padre. Familiares declararon que el hombre era alcohólico y agredía constantemente a sus hijos.