Patovicas de un boliche le dieron una paliza a un joven: lo desfiguraron

En la localidad bonaerense de González Catán se vivieron horas de seria angustia durante la noche del pasado jueves y la madrugada del viernes. Un adolescente fue sometido a golpes por personal de seguridad de un boliche bailable. Tal fue la paliza que quedó inconsciente, pero los guardias le siguieron pegando, para dejarle en claro que la próxima vez le quitarán su vida.

En circunstancias que aún no se esclarecieron, el muchacho apareció a pocas cuadras de su domicilio -no se descarta que los patovicas lo hayan dejado allí-, y fue hospitalizado. Si bien el joven se recupera de sus lesiones, el trauma que le dejaron es gravísimo.

El festejo del cumpleaños de un amigo fue el motivo de la presencia de “T”, de 16 años, en el local bailable M21, cuyos encargados de la seguridad del lugar le permitieron el ingreso a pesar de no ser mayor de edad.

El hecho es que uno de los patovicas estaba especialmente ensañado con el muchacho y sus amigos, molestándolos y empujándolos. Ante las protestas de los chicos, los guardias los sacaron del local y se dio rienda suelta a la violencia.

Una vez que lo encontró una vecina, que presenció el ataque, el joven debió ser trasladado al Hospital Equiza, de dicha localidad, por las severas lesiones desencadenas por la brutalidad de los patovicas. En referencia a ello, Jorge reconoció que el joven “está muy dolorido, no puede comer por la pérdida de sus dientes. Está destruido anímicamente, no habla, se mantiene callado y lo vemos que está muy asustado, no quiere salir a la calle”.

El padre del muchacho radicó la denuncia policial en la comisaría 1ª de González Catán, pero hasta el momento no han sido identificados, ni siquiera aprehendidos los patovicas, que en vez de garantizar la seguridad, priorizaron descargar su fuerza de forma demencial.