Una provincia va a uniformar a sus presos

La reciente decisión del gobierno de la provincia de Santa Fe de implementar el uso de uniformes para los presos ha desatado un intenso debate, generando fuertes críticas desde el sector de los Derechos Humanos. 

El ministro de Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, confirmó que los presos santafesinos comenzarán a usar uniformes de distintos colores, con el objetivo de facilitar su identificación y supervisión.

Sin embargo, esta medida ha sido duramente cuestionada por defensores de los Derechos Humanos, quienes la consideran "estigmatizante" y advierten que podría generar más violencia en los penales, que actualmente se encuentran en una situación de ingobernabilidad.

La diputada provincial y abogada especializada en Derechos Humanos, Matilde Bruera, expresó su preocupación respecto a la efectividad de esta medida, señalando que el verdadero problema en las cárceles de la provincia radica en la falta de control, autonomía y corrupción, y no en el uso de uniformes. 

Asimismo, Bruera considera que esta decisión representa un "atraso" y denota la falta de estrategias efectivas para abordar la compleja situación carcelaria en la región.

El Ministerio de Seguridad argumenta que la medida ayudará en la identificación, supervisión y contabilización de los internos, así como en la detección de situaciones inusuales. A pesar de ello, las críticas persisten, y se espera que el debate en torno a esta polémica medida continúe en los próximos días.