Habló la rosarina que le regaló su bicicleta a un repartidor asaltado: “Estaba desesperado y sentí mucha impotencia”

Gisela, la rosarina que le regaló su bicicleta a un repartidor asaltado, aclaró que el pedido no había sido para ella, sino para unos vecinos.

Un repartidor de comida de Rosario llevaba un pedido a sus clientes este sábado a la noche cuando se vio sorprendido por malvivientes que le robaron su bicicleta. A pesar del mal momento y de sentirse desesperado y humillado, recibió un mimo por parte de una mujer.

El momento en el que Gisela Audisio le regaló su bicicleta al joven quedó captado en por los vecinos y se viralizó rápidamente en las redes sociales. La rosarina habló y aclaró la situación: “No fue cómo se mostró, en realidad el pedido no era para nosotros sino para unos vecinos de dos casas más allá de la nuestra. Nosotros estábamos con mi marido y los chicos y escuchamos los gritos de una chica. Pensamos que le estaban robando y bajamos enseguida”, expresó en una entrevista con rosario3.com

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Habló la rosarina que le regaló su bicicleta a un repartidor asaltado: “Estaba desesperado y sentí mucha impotencia”

Tras salir de su casa, unos vecinos le comentaron que el grito fue proferido por una chica que fue testigo de cómo dos individuos le arrebataban la bicicleta a un repartidor de la empresa “Rappi”. “La chica estaba indignada, se empezaron a acercar vecinos y el chico repartidor estaba muy angustiado. Pobre, estaba preocupado por entregar el pedido, pensó que era para mí y le expliqué que la dirección era dos casas más adelante”, agregó.

“”Llevatela, seguí laburando. Si podés en algún momento comprarte o conseguir otra me la devolvés””, contó Gisela que fue lo que le dijo al joven repartidor mientras le daba su propia bicicleta. La odontóloga de 37 años mencionó que debido a la pandemia no la usaba porque tenía miedo a la inseguridad.

“Sentí mucha impotencia, era lo único que podía hacer por el chico que estaba desesperado”, indicó y añadió: “Estamos todos un poco hinchados, muchos dependemos de estos chicos que hacen delivery por dos pesos y encima los chorean, es terrible”.

A la indignación del robo, se le sumó la falta de compromiso de los policías que patrullaban el barrio: “Mientras todo esto ocurría en plena vereda, pasaron dos patrulleros y ninguno paró aunque los vecinos los llamaron a los gritos. Recién el tercero que pasó por ahí se detuvo y le tomó los datos al chico”.

Finalmente la profesional expresó que nunca supo el nombre del cadete: “Nunca le pedí su nombre. Todo pasó tan rápido y fue tan impactante. Si ven el video, podrán advertir que no tenía el barbijo puesto, porque yo no esperaba ningún pedido y bajamos corriendo”, reveló.