Fabrican camas de cartón que se convierten en ataúd al morir el paciente

La iniciativa es de la empresa ABC Displays busca ayudar a reducir el déficit de camas y facilitar el manejo de cadáveres en caso de ser necesario.

Una empresa de Colombia comenzó a fabricar en ese material camas para hospitales que las requieran ante la emergencia sanitaria por el coronavirus y que pueden convertirse en ataúdes si el enfermo fallece.

Las camas están construidas en cartón corrugado que resiste la humedad, llevan una laca especial para mejora el proceso de desinfección y se pueden reciclar. Son fuertes, ya que soportan al menos 150 kilos, y tienen una vida útil de medio año.

“Vimos que se venía una crisis muy fuerte”, le explica a la agencia AFP Rodolfo Gómez, gerente de ABC Displays, una fábrica de piezas para fines publicitarios. Y suma: “Pusimos a todo el equipo de trabajo a crear algo para ayudar al sector salud”.

El invento surgió de esta empresa bogotana con experiencia en manejo de cartón al tiempo que se reportaba el primer caso de contagio de coronavirus en Colombia, el 6 de marzo.

El virus sobrevive hasta 24 horas en el cartón; pero entre dos y tres días en plástico y acero inoxidable, con los que se hacen las camas de hospital, según estudios de las universidades de California, Los Ángeles y Princeton.

Desde el comienzo de la pandemia, las autoridades saltaban obstáculos para conseguir más camas en centros médicos, en un intento para atender más pacientes y evitar el colapso del sistema de salud.

A mediados de marzo, el virus causó estragos en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil y las imágenes de cadáveres sin sepultar recorrieron el mundo. Esas noticias terminaron de inspirar a la firma bogotana.

“Vimos los que pasó en Ecuador, donde no sabían qué hacer con los enfermos de coronavirus Covid-19, entonces lo convertimos también en ataúd“, cuenta Gómez. “En algunos lugares se están abriendo fosas comunes… Al menos que se vayan en un cajón decente”.

Tardaron un mes y medio en desarrollar el invento y en probarlo en una clínica en Colombia. Ahora, unas de las primeras producciones se destinarán a Leticia, la capital del departamento colombiano de Amazonas, fronterizo con Brasil, principal foco de infecciones de Latinoamérica por coronavirus.

La empresa comenzará donando diez camas al municipio amazónico y después esperan exportar a Perú, Chiley Ecuador.

Cada cama-ataúd tiene un precio comercial de 75 dólares, frente a los 250 dólares de las camillas y los 1.000 dólares de las camas tradicionales hospitalarias.