Un empresario chino se comió una banana valorada en 6 millones de dólares
La pieza, titulada Comedian, del artista italiano Maurizio Cattelan, consiste en una banana pegada a la pared con cinta adhesiva, símbolo del arte conceptual contemporáneo.
El empresario chino-estadounidense Justin Sun, conocido por su incursión en el mundo de las criptomonedas y creador de la plataforma Tron, protagonizó un acto tan controvertido como mediático: comerse una obra de arte valuada en 6,2 millones de dólares.
El hecho tuvo lugar en un lujoso hotel de Hong Kong, donde Sun organizó una conferencia de prensa para ejecutar su singular hazaña. Transmitido en vivo a través de sus redes sociales, el empresario justificó su decisión afirmando que el valor de la obra radica en el consenso cultural y la idea detrás de ella, comparándola incluso con las pinturas de Pablo Picasso.
Comedian debutó en 2019 durante la feria Art Basel Miami, donde se presentó como un cuestionamiento al valor del arte y al mercado que lo sustenta. Desde entonces, la obra ha generado opiniones divididas: para algunos, es una provocación ingeniosa, mientras que otros la consideran un ejemplo del absurdo del arte contemporáneo.
La instalación de Cattelan, que incluye tres bananas (una de ellas donada al Museo Guggenheim de Nueva York), se convirtió en un fenómeno viral y motivo de debate, al tiempo que enfrentó acusaciones de plagio posteriormente descartadas.
Durante su presentación, Sun explicó que su acción no solo fue un homenaje al arte conceptual, sino también una estrategia para resaltar las similitudes entre este tipo de arte y el mundo de los NFT y la tecnología blockchain. Según el magnate, tanto una banana pegada a una pared como un retrato de Picasso o un NFT comparten el mismo principio: su valor no radica en el material, sino en la idea, el contexto y el consenso social que los legitiman.