Política

Un mal cálculo que rompe la paz social en la Cuenca

El reclamo del municipio a YPF por una deuda acumulada desde 2014 desató un conflicto con impacto económico y laboral en la región. El gremio de Petroleros Privados acusa al intendente de poner en peligro la inversión y el empleo, mientras se prevén movilizaciones y un paro

El reclamo que hace el municipio por el pasivo ambiental que deja YPF está generando la ruptura de la paz social en la Cuenca del Golfo.La crítica y peligrosa situación fue denunciada el viernes por el gremio de Petroleros Privados, que confirmó una movilización para este lunes al municipio, que será acompañada por el paro en yacimiento y virtuales piquetes en la rotonda de ruta 3 y 26.

"El intendente pone en riesgo inversión y trabajo"

El secretario general del gremio y diputado nacional por Juntos por el Cambio, Jorge Avila, responsabilizó directamente al intendente Othar Macharashvili por esta situación y lo acusó de poner "en peligro fuentes de trabajo y la inversión en la región".

Avila no anduvo con vueltas y advirtió que "Macharashvili pone en peligro la paz social en el Golfo" por su negativa a firmar la adhesión al decreto de autorización del traspaso de las Áreas Campamento Central-Cañadón Perdido desde YPF hacia PeCom.

De inmediato, con una celeridad que no se observó en toda la discusión por el pago del cánon que está abierta y dilatada desde hace casi un año, el intendente respondió asegurando que "la deuda de YPF no va a frenar el inicio de operaciones de PECOM" ya que la operadora que se hace cargo del yacimiento "no tiene impedimento alguno para iniciar sus operaciones".

El canon de la discordia

La deuda que reclama el municipio es por el canon, ex VDEPIM (Valor de Pérdida de Ingresos Municipales), que YPF debió haber pagado por cada pozo ubicado en el ejido urbano. El problema es que, en estos meses, hubo un acuerdo tácito para eximir de ese pago pero pese a ello el mismo sigue vigente y fue ratificado en la aprobación de la Ordenanza Tributaria Anual 2025.

Esto le dio pie a Macharashvili a reclamar que YPF cancele esa deuda acumulada desde el 2014, que no sería superior a los 6 millones de dólares. Es una cifra importante, que incluso fue presupuestada, pero es realmente insignificante con lo que se está poniendo en juego en este reclamo que, como mínimo, implican 30 millones de dólares y el empleo directo de 300 personas.

Además de esto, y de la inocultable pérdida de tiempo para encontrar la solución al problema, hay que decir que, ya con el virtual paro del lunes, el municipio se verá afectado en 3 mil millones ya que la liquidación de PAE, ante la ruptura de la paz social se retrasará un trimestre.

Esa paz social, que se había logrado en la práctica durante más de 10 años, se romperá este lunes por un mal manejo o pérdida de tiempo en una negociación que insistimos lleva casi un año y por no haber hecho cálculos entre lo que se pone en riesgo por la exigencia de un canon que, por otro lado, siempre fue discutido y observado por YPF que, cuando lo aceptó fue de manera indirecta y luego de fuertes y oportunas negociaciones. Así se construyeron y habilitaron el Gimnasio 4 de kilómetro 8 y la pileta olímpica.

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