Un criadero de perros recibió múltiples denuncias por vender animales al borde de la muerte
Vecinos y dueños de mascotas compartieron experiencias negativas, señalando maltratos y mala praxis por parte del profesional.
Las denuncias contra Gabriel Terceiro, veterinario de la clínica +Cota's en San Martín, aumentaron significativamente tras revelarse su vinculación con el criadero Finca La Nicola, conocido por vender cachorros en condiciones críticas de salud.
Mara, una de las denunciantes, relató que llevó a su perro para que le retiraran unos puntos, pero la atención de Terceiro fue agresiva y poco profesional. "Hace 15 días vine con mi perro para que le retiren unos puntos y este señor me atendió muy mal, atendió mal al perro, quería que yo le apriete el cuello... Lo maltrató, le tiró las patas mal. Le dije que no podía tratar así al perro, lo tuve que retirar y no le sacó los puntos. Me fui, me empezó a insultar, me dijo cosas negativas sobre el perro", comentó. Debido a esta situación, Mara decidió presentar una denuncia en la comisaría.
Marisa, otra vecina, contó que su experiencia con el veterinario fue similar. También relató: "Conozco personas que trajeron su perro por un problema, le hizo análisis, les cobró fortunas, le dijo que los análisis dieron bien y el perro a las pocas semanas murió. En el barrio preguntás y te dicen que no lo lleves a esa veterinaria porque es un desastre", afirmó.
El veterinario Gabriel Terceiro, responsable de la clínica +Cota's en San Martín, negó categóricamente las acusaciones en su contra, afirmando que "Yo no tengo nada que ver. Es todo por redes sociales, no hay nada en la Justicia. Vayan a la Justicia y que hable la Justicia. Es rápido y sencillo escrachar en redes sociales". Sin embargo, las denuncias de maltrato animal y negligencia se multiplicaron, alimentadas por testimonios de vecinos y antiguos clientes que aseguran haber perdido a sus mascotas bajo su cuidado.
Según los denunciantes, el criadero Finca La Nicola operaba bajo condiciones deplorables, vendiendo cachorros que a los pocos días presentaban graves problemas de salud que, en muchos casos, terminaban en la muerte de los animales. Los propietarios del criadero, identificados como Nicolás Walter Bazo, Valeria Griselda Bazo y Rocío Belén Orellana, también están en el centro de las acusaciones, con usuarios de redes sociales señalando que el lugar también es conocido como "Estancia My Friend".