Mileilandia
Un análisis de opinión de Saúl Gherscovici
El presidente Javier Milei y su hermana Karina, encabezaron el sábado un acto en el Parque Lezama para celebrar la transformación de La Libertad Avanza en un partido nacional.
La Libertad Avanza, habrá que ver si lo hará con o sin el PRO, ya está habilitado para competir en las elecciones del año próximo que, como todo comicio intermedio, ofrece muchas dificultades para el gobierno de turno. Sobre todo si este no cumplió o directamente se apartó de sus promesas de campaña.
La principal propuesta de campaña de Milei, como lo coreaban sus seguidores, era terminar con lo que ingeniosamente se denominó "la casta política". Esa idea fuerza se trastocó claramente cuando el ahora presidente se abrazó a Mauricio Macri para vencer en el balotaje. Desde ese entonces a la fecha, la casta real no solo no tiene miedo sino que ve como se la celebra y pondera en las acciones de gobierno.
Lo que antes se criticaba, lo que ahora se hace
El acto del sábado, por otra parte, se organizó y se llenó de militantes a partir de los mecanismos que Milei y los suyos cuestionaron y denunciaron durante toda la campaña. La mayoría del público presente, llegó en micros y colectivos rentados para la ocasión y con militantes rentados. Además de la remuneración y viaje pago, los pasajeros recibieron almuerzo y cena.
Para diferenciarse no hubo chori y vino, sino panchos y Fanta naranja.
El montado del escenario fue realizado por operarios y técnicos de la Ciudad de Buenos Aires y la seguridad estuvo a cargo de Patricia Bullrich, que esta vez no se preocupó en controlar a los micros y pasajeros, como hace con las movilizaciones opositoras. Tampoco aplicó el protocolo de corte de calles ni si indignó por la presencia de niños.
Al margen de que, efectivamente pudo ir público por su cuenta, el resto de los asistentes fueron funcionarios nacionales, entre ellos la mencionada Patricia Bullrich, el ministro de Defensa Luis Petri, la cuestionada Sandra Petovello de Capital Humano, y el autodenominado gordo Dan, a cargo del "trolaje", que esta vez ganó la calle con canciones de cancha, aunque sin ese ingenio y rima popular que las distingue y les ha hecho ser cantadas en estadios de todo el mundo.
Alejado de la realidad
El discurso de los Milei fue la continuidad de los que habitualmente pronuncia el presidente en presentaciones, posteos de x o en las notas que da a los periodistas a los que siempre recurre.
Luego de una breve presentación de Karina a la que evidentemente, además de contenido, le falta coucheo, el presidente dijo que su gobierno "sin dudas es el mejor de la historia de la Argentina".Tras mostrarse orgulloso con el corte de la obra pública y el ajuste más grande de la humanidad, hasta contradijo al número que el propio INDEC dio a conocer el jueves y por el cual se confirmó que la pobreza llegó casi al 53%.
Así como sigue insistiendo que su gestión frenó la hiperinflación "que viajaba al 17.000 por ciento", Milei aseguró que la pobreza bajó al 41%, felicitando por esa estadística, que no guarda relación ni con la realidad ni con los propios números oficiales, a sus ministros más cuestionados, como el de Economía, Luis Caputo, y a la de Capital Humano, Sandra Pettovello.
El resto de las palabras del presidente, como el de las pocas de su hermana, fueron las habituales de odio contra el kirchnerismo y todo el que piense diferente, entre ellos los periodistas, a los que volvió a definir (en el mejor de los casos) como ensobrados.
Lo que se viene
Milei, quien una vez más en Córdoba se lo vio molesto por cumplir con una de las facetas de la tarea del presidente, que es la de estar cerca de la gente y en el territorio donde se sufre, tendrá otra semana complicada en el Congreso de la Nación y en las calles.
En el Parlamento habrá que ver que sucede con la boleta única de papel pero también con la clara y lógica preocupación que generó el nuevo acuerdo entre el gobierno nacional y Gran Bretaña por el que la Canciller Diana Mondino le firmó a su par británico, David Lammy, una serie de ventajas para la continuidad de la usurpación de las Islas, sin que se haya siquiera amagar con discutir la soberanía de las mismas.
Los especialistas dicen que este acuerdo es peor que el que, durante la gestión Macri, firmó el entonces viceCanciller Carlos Foradori con el Ministro de Estado para Europa y las Américas Alan Duncan.
Aquel acuerdo fue rechazado por el Congreso. El actual, además de la reacción de legisladores de Unión por la Patria, también motivó el rechazo público de la propia vicepresidenta Victoria Villarruel
El presidente afrontará el miércoles un nuevo paro en las Universidades que, como ocurrió el 23 de abril, protagonizarán otra enorme movilización, en la que además estarán acompañados por los jubilados. La nueva marcha será, posiblemente, previo al veto total a la ley de Financiamiento Universitario que, como ocurrió con la movilidad jubilatoria, fue aprobado por la mayoría del Congreso.
Una vez más, Milei cree que debe seguir confrontando con el Congreso y con esa realidad que va imponiéndose sobre el relato que solo se sostiene en Mileilandia y con los militantes pagos del Parque Lezama.