La Ley Ómnibus recibe el apoyo de la Cámara Argentina de Biocombustibles
La propuesta impulsada por el Gobierno busca modificar la Ley de Biocombustibles para permitir que todas las empresas participen en el abastecimiento de biodiesel para el mercado interno
La Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO) expresó su respaldo a la Ley Ómnibus propuesta por el Gobierno de Javier Milei, la cual busca promover la libre competencia y la desregulación de los precios en el sector de biocombustibles.
A través de un comunicado, CARBIO destacó su apoyo a los mecanismos de competencia introducidos en el Proyecto de Ley del Poder Ejecutivo Nacional, enviada al Congreso el pasado 27 de diciembre. Se refirieron específicamente a la derogación del establecimiento de precios, la distribución de cupos de abastecimiento a productores por parte de la autoridad de aplicación y otras intervenciones de mercado establecidas en la actual ley 27.640.
El presidente de CARBIO, Luis Zubizarreta, señaló que es necesario eliminar las barreras que impiden la participación de todos los actores de la cadena en el abastecimiento de biodiesel para el mercado interno. Asimismo, expresó su preocupación por la discriminación de las industrias más competitivas y la necesidad de promover un mercado libre que beneficie a todos los actores.
La propuesta impulsada por el Gobierno busca modificar la Ley de Biocombustibles para permitir que todas las empresas participen en el abastecimiento de biodiesel para el mercado interno, eliminando la regulación estatal en el precio de compra de la materia prima de origen vegetal (maíz, soja y caña). Esto permitiría que las petroleras negocien directamente los valores de compra con los productores, sin intermediación del Estado.
CARBIO resaltó que esta apertura traerá mejoras en la calidad del producto e incentivos para los inversores del sector, generando así más y mejores opciones para el consumidor. Además, subrayaron que la intermediación estatal merma la competitividad de la economía y afecta a todos los habitantes del país, por lo que el proyecto de ley actual busca corregir esta inequidad, ofreciendo un biocombustible de calidad a precios razonables y promoviendo una industria competitiva y sustentable.
En relación al proyecto de Ley, CARBIO realizó una serie de observaciones respecto a puntos clave. Solicitaron la incorporación de una cláusula de reciprocidad en la importación de biodiesel para los restantes países comercializadores. Además, sugirieron un valor del 14% para el corte obligatorio este año 2024 y del 15% para el 2025, con posibilidad de establecer un mínimo del 10% en casos excepcionales y justificados, así como elevarlo cuando sea necesario según las políticas de transición energética adoptadas.
Finalmente, CARBIO manifestó la importancia de mantener la no gravabilidad sobre los biocombustibles en relación a tributos como el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (ICO2). Argumentaron que gravar los biocombustibles igualaría su tratamiento con el de los combustibles fósiles, contradiciendo el propósito de gravar aquellos combustibles que más contaminan y promover una matriz energética más limpia.