Senado rechazó cambios en ganancias: ¿Cuál será el impacto en la Patagonia?

La decisión del Senado de no aprobar los cambios en el Impuesto a las Ganancias durante una votación particular del paquete fiscal y la Ley Bases implica una revisión de los beneficios diferenciales para la Patagonia, poniendo en pausa los acuerdos alcanzados por los gobernadores de la región.

En una maratónica sesión, la Cámara Alta rechazó esta mañana los cambios propuestos en el Impuesto a las Ganancias, afectando significativamente a la región patagónica. Aunque la Ley Bases y el paquete fiscal fueron aprobados en general, la modificación específica sobre Ganancias no obtuvo el respaldo necesario, con 41 votos en contra y 31 a favor.

La reimposición del Impuesto a las Ganancias de la cuarta categoría a niveles similares a los del año anterior, antes de la reducción impulsada por el exministro de Economía Sergio Massa, fue un punto de conflicto. El rechazo a este cambio supone un retroceso en las negociaciones que la región patagónica había logrado, ya que se había acordado un esquema diferencial.

El Ejecutivo nacional pretendía establecer escalas de alícuotas más progresivas, oscilando entre el 5% y el 35%, aplicables a ingresos anuales a partir de $36.450.000. La propuesta incluía un incremento del 22% en el mínimo no imponible para las provincias de La Pampa, Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, elevando la base del tributo de $1,8 a $2,2 millones para solteros, y de $2,2 a $2,6 millones para casados con hijos.

Con la negativa del Senado, la negociación lograda por los gobernadores patagónicos vuelve a foja cero, ya que este punto deberá reformularse. Además, el rechazo también se extendió a los cambios en el impuesto a los Bienes Personales, con 37 votos en contra y 35 a favor. Las modificaciones propuestas buscaban aumentar el piso del gravamen de $27 millones a $100 millones, afectando tanto a propiedades en el país como en el exterior.

Esta decisión implica un ajuste en los planes fiscales y económicos para la región patagónica, que deberá esperar nuevas propuestas y negociaciones para obtener beneficios específicos que consideren sus particularidades económicas y sociales, con información de La Tecla Patagonia.