¿Es conveniente cargar nafta super para ahorrar?

En medio de la crisis económica que afecta a los argentinos, surge un interrogante vital para el bolsillo de los conductores: ¿es conveniente cargar nafta súper en lugar de premium para ahorrar? La brecha de precios entre estos dos tipos de combustible se ha ampliado considerablemente, generando dudas sobre cuál es la opción más adecuada.

Históricamente, la diferencia de precios entre la nafta súper y la premium en el mercado argentino rondaba entre el 22% y el 28%. Sin embargo, tras los recientes aumentos, esta brecha se ha ampliado hasta superar los $100 por litro. Ante esta situación, muchos conductores se preguntan si vale la pena optar por la opción más económica sin dañar sus vehículos.

Según expertos del sector automotriz, cargar nafta súper en lugar de premium puede ser una opción válida en la mayoría de los casos. En décadas pasadas, la diferencia de octanaje entre ambos tipos de combustible era significativa, lo que llevaba a problemas como el "pistoneo" al utilizar nafta común en vehículos modernos. Sin embargo, con el avance tecnológico y la mejora en la calidad de la nafta súper, esta preocupación ha disminuido.

Los automóviles modernos, en su gran mayoría, pueden funcionar perfectamente con nafta súper, siempre y cuando cumpla con el octanaje mínimo recomendado por el fabricante, que suele ser de 94 u 95 octanos. La nafta súper de calidad garantiza un rendimiento óptimo del motor sin riesgos para su funcionamiento.

Si bien la nafta premium ofrece un mayor octanaje y una mayor calidad de limpieza del motor, su uso no es imprescindible para la mayoría de los vehículos en el mercado argentino. Cargar nafta premium puede considerarse como un lujo ocasional, pero no como una necesidad para el funcionamiento del motor.

Es importante destacar que agregar aditivos a la nafta súper con el fin de mejorar su calidad no es recomendable, especialmente en vehículos que aún están en garantía. Consultar con un concesionario oficial antes de utilizar aditivos puede evitar daños no cubiertos por la garantía del vehículo.

Ante la incertidumbre sobre qué combustible elegir para ahorrar, la clave está en seguir las recomendaciones del fabricante del vehículo y optar por una nafta súper de calidad, que garantice un funcionamiento óptimo del motor sin comprometer su rendimiento ni su vida útil.