Controversia y Reclamos: Las Momias del Volcán Llullaillaco
Una denuncia de la asociación kolla desencadenó un proceso judicial por violación de derecho
Las tres momias halladas en el volcán Llullaillaco-Yuyay Yaku Wawakuna en 1999 han sido motivo de controversia durante 25 años.
El conflicto sobre la devolución de los restos a su lugar de origen, similar a otros hallazgos arqueológicos, ha involucrado demandas legales. Los niños fueron designados como "Bienes Históricos Nacionales" y la cima del volcán como "Lugar Histórico Nacional", lo que llevó a la comunidad aborigen kolla de Tolar Grande a solicitar la restitución de los cuerpos, reiterando su pedido en 2020.
Según un informe de la UBA, las disputas en torno a restos humanos en museos están cambiando el enfoque de la arqueología actual y generando reclamos de grupos indígenas para modificar las regulaciones estatales. En 2004, el Congreso Nacional de Arqueología de Río Cuarto solicitó la "no exhibición, restitución y declaración del sitio sagrado" de las colecciones de museos.
Una denuncia de la asociación kolla desencadenó un proceso judicial por violación de derechos, pero fue desestimada por falta de consulta al pueblo indígena.
El arqueólogo peruano César Gálvez Mora mencionó tres posturas: devolver los cuerpos a la cumbre del volcán, a la comunidad legítima propietaria o aprovechar las momias como atracción turística para beneficiar a las poblaciones indígenas.
La Ley Nacional de Restitución de Restos Humanos ha generado reposiciones, como el caso del INAPL que entregó cuerpos a la comunidad indígena Punta Querandí en Buenos Aires.