Alerta en invierno: el peligro del moho en el hogar y cómo afecta tu salud

El moho, ese hongo que prospera en ambientes húmedos y oscuros, puede ser más que una simple mancha antiestética en nuestras paredes. 

Detrás de su apariencia inofensiva se esconde un enemigo invisible que puede representar un grave riesgo para la salud, especialmente para ancianos, mujeres embarazadas y niños pequeños.

¿Cómo nos afecta el moho?

La exposición al moho puede provocar una serie de problemas de salud, desde leves molestias hasta graves enfermedades respiratorias. Entre los síntomas más comunes se encuentran:

• Alergias: El moho es un alérgeno común que puede desencadenar estornudos, congestión nasal, secreción nasal, picazón en los ojos y tos.
• Asma: El moho puede empeorar los síntomas del asma y provocar ataques graves.
• Infecciones respiratorias: La exposición prolongada al moho puede aumentar el riesgo de infecciones respiratorias, como bronquitis y neumonía.
• Problemas pulmonares: En casos graves, la exposición al moho puede provocar enfermedades pulmonares graves, como la aspergilosis.

¿Dónde encontramos moho?

En Argentina, el moho es un problema común, especialmente durante el invierno. Las condiciones climáticas propias de la estación, con bajas temperaturas y mayor humedad, favorecen su crecimiento. El moho se puede encontrar en:

• Sótanos: Los sótanos son generalmente húmedos y oscuros, lo que los convierte en un lugar ideal para el crecimiento de moho.
• Baños: Los baños son otro lugar común donde se encuentra moho, debido a la alta humedad.
• Cocinas: Las cocinas también pueden ser propensas al moho, especialmente si hay goteras o si no se ventilan adecuadamente.
• Áreas con goteras: Cualquier lugar donde haya goteras o humedad es susceptible al crecimiento de moho.

¿Qué riesgos presenta el moho para las embarazadas?

• Problemas respiratorios: La exposición al moho puede provocar problemas respiratorios como asma, rinitis y neumonía en las mujeres embarazadas.
• Partos prematuros: Algunos estudios sugieren que la exposición al moho puede aumentar el riesgo de partos prematuros y bajo peso al nacer.
• Defectos congénitos: Existe evidencia que asocia la exposición al moho durante el embarazo con un mayor riesgo de algunos defectos congénitos.

¿Qué riesgos presenta el moho para los niños?

• Infecciones respiratorias: La exposición al moho puede provocar infecciones respiratorias como bronquitis y neumonía en los niños.
• Aggravar el asma: El moho puede empeorar los síntomas del asma en los niños que ya la padecen.
• Problemas de aprendizaje: Algunos estudios sugieren que la exposición al moho puede afectar el desarrollo cognitivo y el rendimiento escolar de los niños.

La mejor manera de protegerse del moho es controlar la humedad en el hogar, especialmente durante el invierno. Algunas medidas que puede tomar son:

• Reparar goteras y fugas de agua lo antes posible.
• Ventilar el hogar regularmente para mantener una buena circulación de aire.
• Usar deshumidificadores en áreas húmedas.
• Evitar que se acumule humedad en las superficies.
• Limpiar las áreas con moho con productos antimicrobianos.

Si encuentra moho en su hogar, es importante tomar medidas para eliminarlo lo antes posible. Si el área afectada es pequeña, puede limpiarla usted mismo con productos antimicrobianos. En tanto, si el área afectada es grande o si tiene problemas respiratorios, es mejor contratar a un profesional para que elimine el moho.