Finalmente, unos abuelos pueden ver a sus seres queridos

Isidro no podía ver a su abuela hace “60, 70 días”, confesó. Antes la veía por videollamada, pero no es lo mismo, dice, “porque no están acostumbrados”. Se trata de un geriátrico en Tandil, provincia de Buenos Aires, que inventó una original forma de que los abuelos puedan ver otra vez a sus seres queridos.

Se trata de una abertura que da al salón del geriátrico, que cubrieron con un marco, donde una cortina plástica hace las veces de pared. A su vez, hay dos orificios en la “pared”, desde donde salen dos grandes guantes. Mediante estas aberturas, el familiar que visita puede, al menos en cierta forma, volver a tocar a sus abuelos.

Un geriátrico en Tandil, Buenos Aires, encontró una original forma en la que los abuelos pueden volver a ver a sus seres queridos

Por supuesto que las medidas de higiene no se dejan de lado ni un segundo. Aquel que visite el geriátrico, tiene que utilizar unos guantes que se pueden extraer desde una caja al lado de la ventana. Una vez terminada la visita, el visitante debe tirarlos inmediatamente, en un tacho de basura que está al lado.

Según relató el canal de noticias TN, todas las abuelas se prepararon para ese momento, el de volver a ver a sus seres queridos. Todas las enfermeras del geriátrico actuaron esta vez de modistas para maquillarlas, arreglarles el pelo.