La defensa de Nahir Galarza pidió prisión domiciliaria por temor al coronavirus
La joven de 21 años fue condenada a perpetua por el crimen de su novio, Fernando Pastorizzo, en diciembre de 2017.
En medio de la pandemia por Covid-19 y el temor por el contagio que crece en las cárceles de todo el país, la defensa de Nahir Galarza pidió la excarcelación y prisión domiciliaria para la joven de 21 años imputada por el crimen de Fernando Pastorizzo (20), ocurrido el 29 de diciembre de 2017 en Gualeguaychú, Entre Ríos.
De acuerdo al petición a la que tuvo acceso Crónica, los abogados José Ostolaza y Pablo Sotelo solicitaron la “excarcelación/libertad con medidas/domiciliaria en subsidio” de Galarza, bajo la argumentación de que el fallo a “prisión perpetua” no está firme sino en instancia revisora de la Corte Suprema de la Nación; y de que en el juicio oral realizado, no existen “riesgos procesales”.
Por otro lado, aseguraron que no hay peligro de fuga, ya que la condenada cursa desde hace 2 años en forma ininterrumpida la carrera de Psicología y que cumpliría la domiciliaria junto a su familia en Paraná.
Además, la defensa argumentó que vencieron los plazos de prisión preventiva y que, ante la peligrosidad del coronavirus en las cárceles, la acusada triplica su edad en relación con su expectativa de vida.
Los abogados de Nahir denunciaron en reiteradas oportunidades la arbitrariedad, parcialidad y la falta de conocimiento en materia de perspectiva de género por parte de la Justicia entrerriana a la que, inclusive, calificaron de “patriarcal, misógina y machista”.
En esta instancia en la cual el fallo está en revisión por parte de la mismísima Corte Suprema de Justicia de la Nación, la defensa mantiene sus esperanzas de que sea revocado por los audios, chats y certificados médicos que sostienen la existencia de una situación de “violencia de género” contra Galarza por parte de Pastorizzo; así como por “falta de las garantías procesales” durante el juicio y el posterior inicio de uno nuevo.
El crimen de Pastorizzo ocurrió entre las 5.10 y 5.15 del viernes 29 de diciembre de 2017, cuando el joven fue encontrado en una calle de Gualeguaychú con un tiro en la espalda y otro en el pecho, junto a su moto y dos cascos tirados en el suelo.
En un primer momento, al declarar como testigo, Galarza dijo que había visto a su ex novio en la noche anterior al crimen, aunque ante la sumatoria de indicios en su contra, quedó detenida y en una segunda declaración reconoció que lo había matado pero que había sido de manera “accidental”.
El 3 de julio de 2018, el Tribunal de Juicio y Apelaciones de Gualeguaychú integrado por Mauricio Derudi, Arturo Dumón y Alicia Vivian, la condenó por unanimidad a prisión perpetua por considerar que “ha quedado destruida la hipótesis de la defensa de que los disparos se produjeron de manera involuntaria”.