La ley de ficha limpia no tuvo quórum en Diputados
El proyecto buscaba impedir que puedan ser candidatos aquellos dirigentes que se encuentren condenados por actos de corrupción.
La Cámara de Diputados no pudo tratar el día jueves el proyecto de ley de ficha limpia por falta de quórum reglamentario. El proyecto buscaba impedir que puedan ser candidatos aquellos dirigentes que se encuentren condenados por actos de corrupción. Así, el dictamen perderá estado parlamentario el próximo 30 de noviembre con la renovación del cuerpo legislativo, con lo cual debería volver a presentarse el proyecto y comenzar todo el proceso de discusión en la comisión de Asuntos Constitucionales.
El presidente de la Cámara, Emilio Monzó, decidió levantar la sesión una vez comprobado que no se cumplían los requisitos para sesionar. El interbloque Cambiemos, junto a Consenso Federal y Argentina Federal, pudo reunir 101 diputados de los 129 necesarios para habilitar la discusión en la sesión especial. Sí se habilitó a los diputados a exponer sus ideas en el recinto.
Uno de los discursos más fuertes fue el de Elisa Carrió, quien dijo que “para hablar de corrupción hay que haber enfrentado la corrupción y en todos los gobiernos. Es cierto que no son todos, pero también es cierto que hay que ponerle nombre y apellido”. Advirtió luego que “el Congreso no puede ser el antro de la impunidad en la Argentina” y remató: “si los señores del PJ o el Frente para la Victoria quieren venganza, no necesitan perturbar al Parlamento, sólo tienen que ir a buscarme y yo tengo la valija lista con todos los camisones rayados para ir a la cárcel común”.
En tanto, el jefe del interbloque oficialista, Mario Negri, dijo que “buscamos una ley a favor de algo y no en contra de alguien” ya que “la moral administrativa en democracia es absolutamente incompatible con la corrupción, igual que el ejercicio de cargos públicos”.