La emotiva carta de Rocío a su amiga muerta en la masacre de San Miguel del Monte
El pasado 20 de mayo se produjo la tragedia de San Miguel del Monte, donde murieron cuatro jóvenes después de chocar contra un camión estacionado, luego de una persecución policial. Danilo Sansone, Gonzalo Domínguez, Camila López y Aníbal Suárez iban en el Fiat 147, junto a Rocío Quagliarello, la única sobreviviente de la trágica persecución policial. […]
El pasado 20 de mayo se produjo la tragedia de San Miguel del Monte, donde murieron cuatro jóvenes después de chocar contra un camión estacionado, luego de una persecución policial.
Danilo Sansone, Gonzalo Domínguez, Camila López y Aníbal Suárez iban en el Fiat 147, junto a Rocío Quagliarello, la única sobreviviente de la trágica persecución policial.
El 20 de julio, Camila hubiese cumplido 14 años, y justo en el Día del Amigo, Rocío publicó una carta en donde se despide de una de sus mejores amigas.
La carta completa de Rocío
Hoy veo todo extraño. En la memoria nadie muere, pero no sabes cómo duele, no te imaginas la falta que me haces y cómo me gustaría que estuvieses.
Te extraño.
Extraño tu voz, tu risa contagiosa, tus consejos, tu carácter muy fuerte, ese por el que tanto chocábamos. Extraño quedarnos largas horas a la madrugada mirando “Casi Ángeles”, que ya la estoy terminando, pero sola. Extraño escuchar música haciéndonos las raperas que tan mal nos salía, jaja… Extraño nuestras tortas fritas duras, nuestros exprimidos de naranjas que nunca faltaban, nuestras noches de verano andando en bici, nuestras juntadas con los chicos, las vueltas por la plaza. Extraño sentarnos en cada esquina para robar wi-fi, nuestros mates en la vereda a cualquier hora, ir a lo de tu abuela cuando dormía para sacarle algo de comida.
Pero lo que más me duele es que voy a extrañar a mi compañera de banco, con la que siempre nos sentábamos al fondo, donde los profes nos retaban por reírnos tan fuerte, pero, así y todo, nunca lograron separarnos.
Hoy, en el Día del Amigo y, por sobre todas las cosas, en tu cumpleaños 14, quiero mandar al cielo un abrazo fuerte, un tirón de oreja, una malteada que ya no será. Me consuela saber que estás en un lugar mejor, pero daría todo porque estés acá, deseo abrazarte y pasar el día con vos, como lo hacíamos 24-7.
Hermana del alma, prometo cuidar de tu mamá, mimarla y pasar tiempo con tus hermanos porque tu familia, que es la mía, nunca se abandona. Mandame fuerzas para seguir adelante, cuídanos y espero que estés riéndote con tu tía, que tanto extrañabas.
Te voy a recordar cada día, porque una amistad así nunca se olvida.
Te amo y te voy a amar siempre.
Posdata 1: Me va a hacer falta mi compañera de vida… Nuestras mamás renegaban tanto de ambas. ¿Cómo voy a hacer sola, para volverlas locas a las dos? Voy a extrañar mucho tu ayuda. ¿Qué puedo decirte? Hoy te extraño más que ayer.