Everton a Bolsonaro sobre coronavirus: “No es una gripecita”
El futbolista le habló a Jair Bolsonaro por la muerte de su abuelo por coronavirus: “Está más cerca de lo que creen”, advirtió
Everton “Cebolinha”, jugador de la selección de Brasil de fútbol, lamentó la muerte de su abuelo por coronavirus. El jugador del Gremio de Porto Alegre advirtió que la enfermedad “no es simplemente una gripecita”.
El jugador de la selección brasileña de fútbol le hizo un homenaje en sus redes sociales a su abuelo, Francisco Albuquerque, que vivía en la zona metropolitana de Fortaleza, capital de Ceará, el segundo estado del país más afectado por la pandemia.
De 24 años, Everton es uno de los jugadores que más se destacan en el fútbol verdeamarelo. A su vez, confesó que el fallecimiento de su abuelo le “rompió el corazón” y que nunca “había sentido algo así antes”.
image.pngEverton le dedicó un homenaje a su abuelo, que falleció por coronavirus
“Parece que el mundo se derrumbó. No tengo palabras para describir el hombre que fue mi abuelo, siempre estuvo presente en mi vida”, lamentó el delantero en una historia compartida en su cuenta de Instagram.
Con aproximadamente nueve millones de habitantes, Ceará registraba, hasta este miércoles, 1900 muertes por coronavirus y un total de 30560 casos confirmados, tal como informó el último balance del Ministerio de Salud. La pandemia del coronavirus, que en Brasil continúa propagándose, se cobró ya casi 19 mil víctimas fatales, además de cerca de 292.000 contagios.
En su publicación en Instagram, Everton alertó a sus seguidores de la gravedad de la enfermedad y aseguró que “está más cerca” de lo que se imaginan. “No es simplemente una ‘gripecita'”, señaló, en alusión al calificativo que acostumbra a usar el presidente de su país, Jair Bolsonaro, para referirse a la enfermedad.
Gremio, campeón de la Copa Libertadores 2017, es uno de los pocos equipos brasileños que retomó los entrenamientos en medio de la crisis sanitaria, con autorización de las autoridades locales. Además del conjunto de Porto Alegre, también volvieron a los trabajos Inter, Atlético Mineiro y Flamengo, aunque este último sin el aval de la Alcaldía de Río de Janeiro.