La primera mujer en subir las cuatro montañas más altas del mundo es mexicana

Viridiana Álvarez comenzó como cualquiera que tiene interés por el deporte. A sus 20 años, comenzó una inclinación por el atletismo, por lo que empezó a participar de maratones de 5 y 10 kilómetros. Después llegó a la Maratón en la Ciudad de México, que tiene un trayecto de 42,195 kilómetros, la misma distancia que la maratón que se corre en los Juegos Olímpicos.

De estas experiencias, pasó a incursionar en disciplinas más difíciles: ciclismo de montaña. Allí es que conoció a un grupo de gente que hacía recorridos a los picos de Orizaba y al Iztaccihuatl, ambos en México. Por fin, después de subir el Orizaba es que comenzó el fanatismo, la locura por el alpinismo.

“Dicen que cuando la mente está lista, el cuerpo sigue”, dice Álvarez. Así explica parte de su motivación, de su fortaleza emocional a la hora de escalar algunos de los puntos más altos de nuestro planeta. Hasta ahora, Viridiana escaló el Aconcagua (2015), Manaslu (Nepal, 2015), el Everest (Cordillera del Himalaya, 2017), y por último, quizás el más peligroso, el K2 en 2018, que abarca partes de Pakistán, Cachemira y China.