Raúl Muriete: "La universidad es un lugar de esperanza colectiva y no se toca"
En una charla con ABC Radio, tras participar de la clas pública en Plaza San Martín, el docente destacó la importancia de la universidad pública como un espacio de conocimiento y esperanza para miles de estudiantes y sus familias.
Raúl Muriete, docente de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, expresó su preocupación por los actuales ataques a la educación pública y la creciente crisis social en el país. En una entrevista con ABC Radio, Muriete enfatizó que la universidad es un "lugar de esperanza colectiva" para miles de jóvenes que aspiran a obtener un título, un lugar que involucra a toda la comunidad en un compromiso con el futuro.
"Cada año, 5.000 jóvenes se inscriben con la esperanza de tener un futuro mejor, y si multiplicas por cuatro (familiares que los apoyan), tienes 20.000 personas esperanzadas", afirmó. Según Muriete, este espacio es esencial no solo para la formación de profesionales, sino también como un centro de desarrollo científico y cultural para el país. "Sin ciencia, sin expertos, la sociedad se autodestruye", subrayó el docente, defendiendo el valor de la educación pública como un pilar fundamental.
Frente a los recientes debates sobre los recortes en la universidad pública, Muriete lamentó que el gobierno actual parezca menospreciar estos espacios de formación y conocimiento. "La universidad es el lugar donde se conserva el saber y el conocimiento de la sociedad. Todos los países tienen claro que la universidad no se toca", declaró.
En una referencia a la reciente postura pública de Mirtha Legrand defendiendo la universidad, Muriete destacó la importancia de mantener este espacio como un bien común. "Es el lugar donde se genera ciencia y se forma a los futuros profesionales", agregó, indicando que el sistema político solo funcionará bien si se garantiza el acceso a la educación y la ciencia.
Muriete también reflexionó sobre el desencanto de los jóvenes que votaron por proyectos políticos que ahora ven sus efectos en su vida cotidiana. "Muchos jóvenes que votaron por el modelo de la vieja política están empezando a darse cuenta de que sus familias no están llegando a fin de mes, que deben hacer recortes en sus gastos básicos", expresó. Según el docente, este fenómeno está creando una toma de conciencia entre los estudiantes, quienes ahora perciben la necesidad de defender la educación pública y la solidaridad como base para el cambio social.
El mensaje final de Muriete fue claro: la universidad no solo es un espacio académico, sino un pilar social que debe ser defendido por todos, porque su deterioro afectará a la sociedad en su conjunto. "No podemos permitir que se destruya el tejido social que hemos construido durante años. La comunidad no lo va a permitir", concluyó.