Comodoro Rivadavia

La crisis de la obra pública afecta también a Comodoro

El Municipio lucha por reactivar proyectos frente a la difícil realidad económica

abcdiario

Todavía no se reactivaron las obras en ejecución, hay alrededor de 40 licitadas en espera para comenzar y comenzaron a llegar telegramas de despido desde las empresas que tienen obras nacionales. El sector privado ya no puede sostener y el Municipio debe hacer malabares con un presupuesto interesante pero con una inflación galopante.

El último año ya había sido complicado por el nivel inflacionario y la necesidad de redeterminaciones de precio. Aún así las empresas no dejaron de presentarse a licitaciones y el empleo se mantuvo en el rubro de la construcción, con obras nacionales importantes pero sobre todo con una gran cantidad de infraestructura solventada con presupuesto municipal.

El propio exintendente Juan Pablo Luque ha sostenido en numerosas entrevistas que durante su gestión se han hecho más de 530 obras. La afectación específica para obras públicas de los fondos provenientes de la Ley de Hidrocarburos promovió una gran parte de ellas.

AbcDiario consultó al exsecretario de Obras Públicas del municipio, Maximiliano López, sobre la transición y confirmó que quedaron en ejecución alrededor de 40 obras, de distinto calibre, con presupuesto municipal y otro número similar licitadas en los últimos meses que deberían comenzar en estos días si nos llevamos por los tiempos administrativos habituales.

Sucede que hay un concepto que, con la inflación galopante, pasó ser protagonista absoluto: redeterminación de precios. Cuando el Municipio licita una obra, la empresa ganadora -además de presentar una oferta menor al resto de la competencia- no debe superar en un 20% el presupuesto oficial. Pero una vez licitada cada obra, entra en un proceso adminsitrativo que lleva de 3 a 6 meses para comenzar la ejecución, con un plazo posterior de ejecución de entre 90 y 240 días según la dificultad de la obra en cuestión.

Durante todo ese período, es imposible que con el nivel de inflación impredecible de Argentina las empresas constructoras puedan afrontar la obra con el presupuesto inicial. Por ello necesitan la redeterminación de precios, que sería una actualización. Y dicha actualización no lleva menos de dos meses, cuando nuevamente los costos volvieron a subir. Para el privado es un círculo vicioso imposible de seguir absorbiendo.

Con la ordenanza de obras públicas aprobada en la gestión pasada, el Municipio mejoró en la celeridad de los procesos y fue clave para poder hacer muchas obras que el contexto económico comenzaba a complicar.

Se conformó por ordenanza una comisión que seguía estas redeterminaciones con un presidente, y tres integrantes técnicos del Municipio de las áreas de infraestructura, asesoría legal y economía para manejar los procesos con transparencia y profesionalismo. Aún así, con los pasos administrativos necesarios que exige el manejo de fondos públicos, las redeterminaciones tardan alrededor de 60 días

Culminó el receso vacacional ¿cuándo arrancan las obras?

Generalmente las empresas de la construcción dan vacaciones en el período de fiestas y los primeros días de enero. Siempre en la segunda semana de enero es habitual el recorrido de los intendentes por alguna obra en ejecución para mostrar acción y gestión.

El intendente de Comodoro, Othar Macharashvili, dialogó con los medios el viernes pasado y se refirió a la situación de la obra pública que impide que pueda realizar este recorrido habitual, con muchas obras que están paralizadas o esperando reactivación.

"La crisis económica y la asimetría que se generó en lo que son precios que se han disparado hace que hoy no haya precios ciertos para licitar, comenzar obras y para actualizar los montos. Por eso, con responsabilidad es que estamos trabajando contra reloj para actualizar esas obras y ver qué obras hacer para que no impacten en forma negativa en las empresas. Hoy tenemos muchos operarios sin trabajo porque la situación financiera de las empresas es crítica", reconoció.

"Vamos a ver si en breve ponemos en marcha las obras públicas con fondos municipales y ver cuáles podemos arrancar para que los barrios tengan mantenimiento vial por ejemplo", explicó. Sucedió que además de la inmensa complicación financiera para las obras, la Secretaría que hoy dirige Luis Romero dejó de tener a cargo algunas áreas como "Mantenimiento de obras" y "obras viales" que pasaron a la esfera de Ricardo Gaitán (Control Operativo), por lo cual hay cuestiones para organizar internamente.

En su relato, Macharashvili prosiguió con la dura explicación del costo de las obras ."Hay obras grandes como el ARA San Juan, una obra que la gestión anterior definió como prioritaria, pero la reparación del tramo que falta (que derrumbó la marejada) valía $250 millones y hoy vale más de $550 millones, que vamos a tener que afrontar y ver cómo se disparan los precios para que esa obra no nos gane la inflación. Es una obra que tiene que estar terminada antes del invierno para que no se siga degradando. Es nuestra responsabilidad que esto sea más virtuoso".

Por último, advirtió que el panorama es muy complejo y la situación del país lo agrava más. Necesitamos qué va a hacer el gobierno nacional con todas las obras públicas que están iniciadas pero paradas y que la región necesita", en referencia a infraestructura fundamental ya comenzada que, pese a que el gobierno nacional dijo que seguirían en marcha, hoy están paralizadas, como el emisario marino, la repotenciación del acueducto, la doble trocha Comodoro-Caleta, el pluvial de av. Chile y la descarga al mar (que si bien no inició arquitectónicamente se pagaron adelantos financieros, por lo cual técnicamente está comenzada).

En ese cúmulo está también el Estadio Centenario, que había logrado un enorme avance en el último año pero, de nuevo, la necesidad de redeterminaciones de precios sumado al desfasaje financiero muy grande que tiene respecto de las veces que se licitó y se actualizó (cabe recordar que la obra comenzó en 2005) hoy dificulta su continuidad.

El propio secretario general de UOCRA, Raúl "conejo" Silva, lamentó la semana pasada la llegada de 80 telegramas de despido por parte de distintas empresas que tienen a cargo obras nacionales y provinciales en Comodoro. La esperanza está puesta en lo que se pueda mover a nivel municipal.

El Municipio entonces se enfrenta, por un lado, a la inacción del gobierno nacional con el cual habrá que pelear al menos por las obras ya comenzadas; la incertidumbre respecto a las pocas obras provinciales; y la necesidad de priorizar las obras municipales.

A su favor tiene un presupuesto jugoso de 30 mil millones de pesos exclusivos para el área de infraestructura. Quitando los gastos de funcionamiento, quedan al menos 18 mil para afrontar obras y de ese monto un 30% ya está presupuestado para las redeterminaciones de precios, por lo cual como diría un histórico referente del fútbol argentino "la base está".

Esta semana recién definieron un nuevo presidente para la comisión que analiza las redeterminaciones de precios, por lo cual, superado este atraso por cuestiones burocráticas, la obra pública local debería arrancar motores en breve para empezar a respirar.

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