El recuerdo de la tragedia de los bomberos de Madryn, a 31 años del incendio fatal
La comunidad de Puerto Madryn revive el dolor y el homenajea a los 25 cadetes que perdieron la vida enfrentando un incendio el 21 de enero de 1994. Entre las víctimas había un niño de 11 años y una pareja a punto de casarse.
El 21 de enero de 1994, Puerto Madryn fue testigo de una de las mayores tragedias que marcaron a los bomberos voluntarios en el país. Ese fatídico día, 25 cadetes del cuartel local, incluidos 11 menores de edad, salieron a combatir un incendio de campo en las afueras de la ciudad. Equipados con herramientas básicas como palas y rastrillos, no imaginaban que el viento cambiaría de rumbo y desataría el desastre.
El fuego, avivado por las ráfagas impredecibles, arrasó con el grupo, que quedó atrapado entre llamas y humo. En medio de la desesperación, se escucharon los últimos pedidos de auxilio entre las 18:00 y las 18:15. El rescate llegó demasiado tarde: a la mañana siguiente, una patrulla halló los primeros cuerpos carbonizados esparcidos en el campo, junto a los cascos y herramientas.
Entre las historias más desgarradoras, se destaca la de un niño de 11 años, Marcelo Miranda, que llevaba alpargatas en lugar de calzado reglamentario, y la de una joven pareja que planeaba casarse pronto.
El dolor de la comunidad se materializó el 22 de enero de 1994, cuando 23 féretros fueron velados en el Gimnasio Municipal. Otros dos cadetes, Ramiro Cabrera (16) y Marcelo Miranda, tuvieron ceremonias aparte por motivos religiosos. Al día siguiente, una caravana de cuadras interminables acompañó a los fallecidos hasta su descanso final en el cementerio local.
Hoy, 31 años después, Puerto Madryn los honra con una serie de actos conmemorativos. Las actividades incluyen un homenaje en la Plaza San Martín, donde se recuerda el "Día del Mártir Bombero Voluntario", y la inauguración de un monumento en el barrio Mapu Ngefu.
Esta tragedia no solo dejó cicatrices en las familias, sino que también alertó al mundo sobre los riesgos que enfrentan los bomberos voluntarios. Aquel incendio que se llevó tantas vidas sigue siendo un recordatorio imborrable del sacrificio de quienes comienzan su camino en el servicio comunitario, con informaciòn de Red43.