Bomberos perdieron maquinaria en el incendio al norte de Comodoro y advierten que la ayuda tardó en llegar
Jorge Soto, del cuerpo activo de Bomberos Voluntarios, relató las dificultades que enfrentaron para sofocar el incendio de pastizales en la Ruta 3. "El fuego era constante, el viento era muy fuerte y hasta en momentos la ruta quedó anegada por el humo", señaló. Además, indicó que la falta de maquinaria complicó la tarea: "Defensa Civil nos atendió muy bien, pero no tenían maquinaria ni choferes por el feriado".
Jorge Soto explicó que el incendio comenzó como un foco pequeño, pero el viento lo volvió incontrolable. "El aumento del viento fue creciendo cada vez más y se les hizo insostenible, así que tuvieron que pedir apoyo", relató. Ante la magnitud del fuego, enviaron dos móviles más: "Uno del destacamento 31 y otro del cuartel central". Sin embargo, la falta de maquinaria dificultó las tareas. "Personalmente hablé con la Guardia de Defensa Civil y nos dijeron que lamentablemente no tenían maquinaria disponible. Algunas estaban rotas, otras ocupadas, y los choferes estaban de vacaciones o se habían tomado el feriado", explicó Soto.
También se solicitó ayuda a YPF: "Ellos pidieron autorización a su jefe para ver si encontraban un chofer disponible y después de tres o cuatro horas llegó una máquina". El avance del fuego puso en riesgo al personal: "Algunos bomberos ingresaron unos 100 o 200 metros al interior del campo, pero no se dieron cuenta de que el viento había cambiado. Se tuvieron que salir corriendo y dejaron los materiales en el lugar", detalló. En total, se quemaron seis líneas y una manguera, con una pérdida estimada en más de 3 millones de pesos. Soto también destacó la complejidad de combatir incendios en campo abierto: "Es totalmente distinto a sofocar un incendio en una zona más poblada. En Comodoro, si bien hay incendios de campo, son más chicos y controlables. Pero en el campo, con la rotación del viento y ráfagas de 60, 70 km/h, el trabajo se hace mucho más difícil". Ante la dificultad en las comunicaciones, debieron improvisar un sistema: "Por suerte, estamos muy bien acompañados con el sargento Martín Rearte, que está a cargo de comunicación. Trasladó un móvil, instaló una base provisoria en una de las zonas más altas de los cerros y con eso pudimos comunicarnos desde el lugar del incendio hasta los cuarteles".
Finalmente, Soto cuestionó en diàlogo con Radio del Mar, la demora en la llegada de la maquinaria: "A veces la situación hace que uno necesite una respuesta rápida, no de dos o tres horas después. El momento más crítico fue la primera hora de trabajo". Además, señaló el riesgo que esto implica: "Se trasladaron al lugar cuatro autobombas y 25 bomberos, dejando la ciudad también al descubierto".
(foto ilustrativa)