Conmemoración de la Masacre de Trelew: Memoria, cultura y resistencia en la Semana de la Memoria
En la Semana de la Memoria, Trelew recuerda a las víctimas de la masacre de 1972 con una serie de actividades culturales, incluyendo teatro, literatura y reflexión política. Los eventos destacan la relación entre identidad, derechos humanos y cultura, conmemorando la resistencia popular en plena dictadura.
La Masacre de Trelew, ocurrida el 22 de agosto de 1972, marcó un oscuro precedente en la historia de Argentina, siendo una antesala de la brutal represión que vendría luego del golpe de 1976. Dieciséis prisioneros políticos fueron fusilados en la Base Almirante Zar: Carlos Astudillo, Rubén Pedro Bonnet, Eduardo Capello, Mario Emilio Delfino, Alfredo Kohon, Susana Lesgart, José Ricardo Mena, Clarisa Lea Place, Miguel Ángel Polti, Mariano Pujadas, Carlos Alberto del Rey, María Angélica Sabelli, Humberto Suárez, Humberto Toschi, Alejandro Ulla y Ana María Villarreal de Santucho. Diez de ellos nacieron, vivieron, cursaron sus estudios y militaron en Córdoba. Tres prisioneros lograron sobrevivir, pero luego fueron secuestrados y desaparecidos durante la dictadura de 1976: Alberto Miguel Camps, María Antonia Berger y Ricardo René Haidar.
Durante la Semana de la Memoria, Trelew conmemoró estos hechos trágicos a través de diversas actividades culturales señaló Silvia Pecci, de la Asociación de Familiares de la Masacre de Trelew a ABCradio , resaltando la importancia de la cultura en la construcción de la identidad y la memoria colectiva. Entre las actividades destacadas, se presentaron tres obras de teatro que abordan el tema del terrorismo de Estado: "Los recuerdos de Dora", que explora las vivencias durante la dictadura; "22 de agosto", una obra del actor rosarino que representa la masacre, y "La Potestad", escrita por Tato Pavlovsky y dirigida en esta ocasión por Norman Brisky, quien también participó en la conmemoración.
Además, se presentó el libro "Revoluciones", de Mariana Dufort, que rinde homenaje a Osvaldo Bayer, un histórico defensor de los derechos humanos y la memoria en la Patagonia. La obra refleja la lucha de los pueblos originarios, un tema con el que Bayer estaba profundamente comprometido.
La conmemoración también rememoró la toma del Teatro Español de Trelew, un acto de resistencia popular que ocurrió dos meses después de los fusilamientos, en plena dictadura. Este teatro, cercano a los afectos de la comunidad, fue escenario de una asamblea popular que repudió los fusilamientos y exigió la liberación de vecinos detenidos por su participación en protestas.