Caleta Olivia

Caleta Olivia: Trapecista del Circo Dihany lucha por su recuperación tras caer 8 metros y denuncia precariedad laboral

Lautaro Bustos, un joven trapecista que sufrió un grave accidente mientras trabajaba en el Circo Dihany en Caleta Olivia, se encuentra en una ardua batalla por su recuperación y denuncia la falta de medidas de seguridad y asistencia por parte del circo

Mariela Segundo, madre de Lautaro Bustos, el trapecista que cayó 8 metros y medio en el circo Dihany y quedó paralítico, brindó un desgarrador relato sobre la situación que atraviesa su hijo y la falta de asistencia por parte del circo.

Lautaro, oriundo de San Antonio, Río Negro, se encontraba trabajando en el circo sin las medidas de seguridad necesarias. "El tuvo un accidente en el circo Dihany; estaba en negro; sin cobertura social ni ART; sin red, arnés, nada; ninguno de los elementos necesarios para evitar el accidente", afirmó Segundo en Radiovisión.

El joven trapecista cayó durante la función del 27 de mayo y se fracturó la quinta vértebra. Tras ser intervenido quirúrgicamente y pasar por terapia intensiva, actualmente se encuentra en rehabilitación, con pronóstico de paraplejia. "Mi hijo quedó paralítico. Está con sonda, pañales; le sacaron el oxígeno y evoluciona. Ahora esperamos una derivación para un centro de mayor complejidad", detalló Segundo.

La madre de Lautaro denuncia la precariedad laboral y la falta de asistencia por parte del circo Dihany. "No tengo contacto con la gente del circo porque se borraron olímpicamente. No me han ayudado en nada, en sus gastos, medicamentos. Todo corre por mi cuenta", aseguró. "Empece una demanda", agregó, indicando que exige un resarcimiento económico y la cobertura de los gastos médicos y de rehabilitación.

Segundo también expone las condiciones precarias en las que trabajaba su hijo. "Ellos ya habían tenido problemas con un empleado y lo arreglaron con una casilla y un mísero dinero. Y como hay necesidad, la gente acepta cualquier cosa. Ellos no pagan nada, ni el seguro del espectador", señaló.

La desilusión de Mariela Segundo es profunda. "Se quedaron hasta con el sueldo de mi hijo. No me quisieron dar nada. Solo pude sacar la ropa. Se quedaron con todas sus pertenencias. Ni el celular me querían dar. Ellos le iban guardando plata. Mi hijo me dijo que tenía plata en su riñonera, pero en el circo quedó todo", lamentó

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