¡Se hartó! Patricia Sosa sobre las mujeres que piropean a su pareja “Voy a ir a cag… a trompadas a alguna”

Patricia Sosa y Oscar Mediavilla comenzaron su historia de amor a una muy temprana edad cuando ella tenía 16 y él 17. Si bien estuvieron separados durante tres años en los 90’s, hoy en día su relación es más sólida que nunca y la pandemia los ayudó a redescubrirse.

Recientemente la intérprete de “Aprender a volar” brindó una entrevista a Por si las moscas (La Once Diez/Radio de la Ciudad), donde se declaró fan del Cantando 2020, donde su pareja es jurado. Este hecho le permite a la cantante saber todo lo que sucede delante y detrás de cámaras.

Sosa aseguró que Mediavilla le cuenta absolutamente todo, incluso si alguna famosa “le tira onda detrás de cámara”. Ante la pregunta de cómo reacciona ante esas situaciones, Patricia aseguró que sólo se ríe.

“¡Le tiran onda! Cuando viene del estudio, me cuenta: se me acercó Fulana y me dijo ‘mirá que me calentaste de verdad’. Lo tomo a risa porque sé con quién estoy”, expresó con humor.

Que se encuentre confiada sobre quien eligió como compañero de la vida no quiere decir que si alguien se pasa de la raya no va a hacer nada. “Pero que no se pase a mayores porque voy a ir a cagar a trompadas a alguna”, sostuvo con un implacable tono ¡Sin Rodeos!

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Patricia Sosa en Instagram

Recientemente la pareja de Oscar Mediavilla se convirtió en el centro de las miradas por contar en Masterchef Celebrity una experiencia paranormal que tuvo con la comida. “Un día subí a un cerro muy alto. Fui a hacer un avistaje de luces, de seres de otro plano. Cuando bajaba de la montaña, una montaña muy alta, la bruma me tapa de aquí para abajo -dijo señalándose el torso-. Y era muy difícil bajar, muy difícil”, comenzó y continuó: “Entonces pensé: ‘¡Dios mío, que se ilumine algo porque nos vamos a caer!’ Y en eso, una luz se puso en el camino y nos guió hasta la salida. Entonces, la señora contactada se dio vuelta y me dijo: ‘Deberías dejar de comer carne porque tiene una toxina que inhibe la telepatía’. Y no comí nunca más”, contó y dejó a todos sorprendidos.