Denunció a su tío por un abuso de 7 años, estaba a su cuidado mientras su padre trataba su cáncer
El hombre es un reconocido bioquímico de la ciudad
Constanza Gilabert es una joven entrerriana quien tras la denuncia de los abusos cometidos en su infancia sintió que dejó una mochila en Tribunales. Así ella misma lo manifestó en una entrevista, fue algo liberador, llevó su caso hasta la Suprema Corte de Justicia.
La joven que hoy tiene 32 años relató que los abusos se cometieron cuando tenía 6 años entre los detalles escabrosos sobre las acciones que obligaba llevara adelante la menor están haber sido víctima de manoseo y tener que practicarle sexo oral al marido de su tía.
Ella y su hermana fueron víctimas del monstruo que es un bioquímico reconocido de la ciudad llamado Carlos Ríos, la Justicia determinó que los hechos prescribieron ý ambas decidieron ir a la instancia superior ya que además de visibilizar el caso quieren que el abusador cumpla una condena.
El hombre reconoció los hechos a la madre de las jóvenes, admitió que tuvo un desliz pero eso no bastó para las denunciantes que necesitaban que se haga justicia para poder seguir viviendo en Concordia y evitar que lo que les suecedió a ellas le pase a otras mujeres publicó Infobae.